¡¡Devoré Decenas de Grimorios Pero No Obtuve Ningún Resultado!! (
Resumen[]
Haruhime preguntó cuantos Grimorios había leído. Fels respondió que, incluyendo los que Lili lo había forzado a escribir en un apuro, trece. Haruhime simplemente se disculpó.
En una habitación de la Mansión Chimenea, se encontraban Aisha con una expresión adolorida, Haruhime al borde de las lágrimas y Fels con una mirada melancólica. Frente a ellos yacían en un escritorio numerosos Grimorios usados.
Aisha estaba atónita de que aún con tantos no hubiera obtenido una nueva magia, siendo que previo a su expedición había adquirido una en un solo intento. Haruhime nerviosamente le preguntó a desconcertado Fels cuanto sería el costo sumado de todos los Grimorios que había consumido. El antiguo sabio señaló que, dado que sus Grimorios eran de los mejores en el mundo, aún haciendo un estimado bajo el costo total sería de unos 6,500,000,000 valis. Al escuchar eso Haruhime casi se desmayó y de hecho se cayó, aunque Aisha la atrapó.
Mientras trataba de consolarse a sí mismo, Fels les explicó que en ocasiones, aún si una persona tenía un espacio para magia vacío, este no se llenaba aunque leyera un buen Grimorio debido a factores externos.
Para reconfortar a Haruhime, Fels les contó que eso era común entre magos de alto nivel, en especial entre hechiceros. La mayoría tenía poderosas "semillas" dentro de ellos, y ya fuera que hubieran adquirido magia naturalmente o forzosamente a través de un Grimorio, la tercera usualmente era difícil de adquirir. Añadió que probablemente había sido así incluso para Riveria.
Fels concluyó que quizás necesitaba vivir una experiencia o evento único para obtener un tipo especial de excelia. Ante sus palabras Haruhime quedó sorprendida, mientras que Aisha decidió cambiar de tema. La Amazona declaró que usarían la ayuda del antiguo sabio para entrenar su estadística de magia, decidida a sacarle el máximo provecho posible ya que no participaría en la batalla.
Tras ello le dijo que si parecía que su magia sería revelada al público debía escapar y protegerse pero la Renard la interrumpió, declarando que no huiría. Haruhime no quería protegerse solo a sí misma ni volver a ser "la prostituta de la destrucción" como antes, sino que deseaba ayudarlos a todos. Más que nada, no quería entregarle a Bell a Freya después de lo que había hecho.
La "cara de mujer" de la chica, la cual nunca había visto antes, dejó estupefacta a Aisha por un momento. Después, reconociendo su determinación y cuanto había crecido, Aisha sonrío llena de orgullo como el de un hermana y le dijo que estaba haciendo una buena expresión.