Girls x Cross ~Cuatro caminos de medio año~ (ガールズ×クロス ~半年間の四道~) es una historia corta incluida en la compilación de historias cortas de spin offs lanzada como parte del noveno de los diez proyectos de la Campaña del 10° Aniversario de DanMachi.
Resumen[]
Lefiya se encontraba estudiando diligentemente en su cuarto cuando de repente Elfy entró con los Rankings de Aventureros de esa semana. Al principio no quería verlos pero finalmente cedió una vez que su amiga le recordó que no habían convivido últimamente y cuanto la había preocupado recientemente.
Lefiya sintió orgullo al escuchar las posiciones en los rankings de las ejecutivas de su Familia aunque no le importó mucho como le iba a ella. Elfy quedó decepcionada por su indiferencia. Rememoró sobre como algo así la habría hecho avergonzarse y reaccionar de manera linda antes, sintiéndose triste por cuanto había cambiado. Harta de la actitud seria de su amiga pasó al resto de rankings y gritó sorprendida al ver que Bell había superado a Ais en un ranking.
En el Ranking de Más Rápido de la Ciudad, cuyo top tres solía ser Allen, Bete y Ais, ahora estaba Bell en segundo lugar. Lefiya apenas toleraba que su rival hubiera alcanzado el Nivel 5 y que por ende la superara, siendo esa la razón de que estudiara y entrenara tan arduamente, pero no soportaba que superara a Ais. Acusando a las encuestas de fraude Lefiya proclamó que confrontaría a los encargados y los forzaría a rehacerlas para devolver las cosas a como debían ser. Luego de que saliera enfurecida de su habitación Elfy comentó que se sentía tranquila de ver que, por más que hubiera cambiado, seguía siendo igual en ciertos aspectos.
Lefiya estalló en las calles contra Syr al escuchar que recolectaba votos para un ranking claramente enfocado en Bell. La camarera jugó con ella sin importarle su molestia hasta que la Elfa le preguntó el motivo de su obsesión con Bell, abandonando su actitud burlona al responder que lo amaba. No creía que eso fuera a ayudarlo, pero quería saber lo que todos pensaban de su amado. Además creía que si lo hacía podría aliviar sus sentimientos de amor por él. Aquello podría hacerla enloquecer aún más de dolor, pero precisamente por eso Syr quería hacerlo como una forma de castigo, así como de expiar sus pecados.
Syr entonces le preguntó que pensaba ella de Bell, señalando su clara molestia por su posición en los rankings cuando trató de decir que no le importaba. Su primer impulso fue lanzar un torrente de insultos y enlistar algunas de sus malas experiencias con él. Sin embargo, se dio cuenta que estaba siendo evaluada y cerró sus ojos para meditar sobre su respuesta. Una vez que los abrió proclamó que el chico era su digno rival, y era por eso que ni ella ni su Familia perderían ante él.
Syr comentó que su alma parecía hermosa y se preguntó que habría pasado si Hedin la hubiera reclutado. Confundida, Lefiya pensó en preguntarle que quería decir hasta que se percató de que eran el centro de atención de todas las personas a su alrededor. Dándose cuenta de lo avergonzada que se sentía, Syr la invitó a acompañarla para asegurarse de que no realizara encuestas extrañas y escuchar las opiniones de todos.
Luego de cruzarse en la calle por casualidad Ais y Ryuu tuvieron un breve e incomodo intercambio de palabras antes de optar por seguir sus caminos. Sin embargo, Ryuu al final decidió pedirle algo de su tiempo. Tras llevarla a una terraza la Elfa se disculpó profundamente por emboscarla durante el incidente de los Xenos. Aunque apenas mostró una reacción externamente, por dentro Ais se quedó sin palabras al formar la conexión de que aquella mesera de la Anfitriona de la Fertilidad era Vendaval, un antiguo miembro de la Familia Astrea, que había participado en la Gran Guerra de Facciones y además era la aventurera enmascarada que había enfrentado.
Ais aprovechó para preguntarle si habían peleado antes, presintiendo que había sido en la Edad Oscura, sospecha que Ryuu confirmó. Dejando su batalla en la Calle Daidalos de lado, Ryuu quiso saber como hizo para crear la brecha entre sus habilidades de combate que notó esa noche. La espadachín simplemente respondió que había matado a demasiados monstruos. No obstante, también confesó que le causó varios problemas a su Familias quienes siempre la apoyaron, en especial durante los últimos seis meses.
Tras darle su respuesta Ais le planteó la misma pregunta. La mesera lo atribuyó a que había terminado su viaje. Le contó que había perdido su "justicia", pero fue incapaz de separarse completamente de ella y pretendió tenerla, hasta recientemente que había encontrado su respuesta. Aunque no comprendió totalmente lo que dijo, Ais estaba feliz de ver que se había sobrepuesto a problemas que la atormentaron. Su buen ánimo sin embargo fue reemplazado por consternación cuando bajó la mirada. Por más que le apenaba hacerlo Ryuu le preguntó que pensaba de Bell, curiosa luego de escuchar que Ais era a quien el chico amaba, tomándola por sorpresa.
Ryuu quedó decepcionada cuando tan solo dijo que parecía un conejo, lo mismo que respondió cuando Hestia le realizó la misma pregunta hace meses. No obstante, desde entonces varias cosas habían ocurrido. Su choque durante el incidente de los Xenos, como la salvó de su "llama negra" en Knossos y lo feliz que demostró estar por haberla conocido cuando Freya encantó la ciudad. Todo eso hacía que pensara en él más que antes, algo que admitió abiertamente. Nuevamente Ais le devolvió la pregunta por curiosidad. Aunque se sonrojo al principio Ryuu reunió su determinación para contestar pero fue interrumpida por Syr y Lefiya, quienes justo pasaron frente a la terraza por coincidencia.
A Ryuu le pareció inusual verlas juntas y Syr explicó que estaban realizando encuestas debido a su interés en Bell. Lefiya negó que le interesara el chico y quedó impactada cuando Ais comentó que ellas estaban hablando de él. Syr entonces propuso que tuvieran una charla de chicas sobre a quien le importaba más Bell. Syr proclamó en voz alta su confianza en que su amor era el más grande, Ryuu expresó consternación porque su amiga seguía con sus desesperadas tendencias de lastimarse a sí misma, a Ais le sorprendió que a todas ellas les interesara Bell y Lefiya gritó que no era su caso. Así la mesa de dos se convirtió en una de cuatro y las voces de las chicas no pararon de hacer eco ahí, el cruce en el que los caminos se intersecaban.