La falsa acusación de la chica zorro (
Resumen[]
El día después de la misión a la Aldea Oculta de los Xenos, Haruhime se encontraba caminando tristemente por un pasillo de la Mansión Chimenea. La casa se sentía sola y vacía sin Wiene, dejando a todos con un indescriptible sentimiento de desolación.
Tan solo recordar los momentos con ella hacían que los ojos de Haruhime se llenaran de lágrimas. Inicialmente había pensado en Wiene como una hermana menor, pero al recordar como ellas y Bell pasaban tiempo juntos en el patio como una familia, se dio cuenta que la chica dragón había sido más como una hija para ella.
Después de seguir caminando por el corredor se detuvo frente a una puerta. Después de tocar y dudar por un momento, entró a la habitación de Bell, lugar al que Wiene solía ir, usualmente para pedirle que la dejara dormir con él. Haruhime se acostó en la cama y, sintiendo como si el aroma y la calidez de Wiene aún estuvieran presentes, finalmente se echó a llorar, temblando mientras hundía su cabeza en las sábanas para tratar de contener su llanto.
Desafortunadamente, el resto de la Familia excepto por Bell la vieron desde la puerta y malentendieron la situación, creyendo que estaba en celo. Confundido porque todos estuvieran reunidos allí, Bell preguntó si pasaba algo pero no recibió ninguna respuesta, con todos declarando que no podía ver lo que estaba pasando dentro, dejándolo desconcertado ya que era su habitación. Haruhime también se alteró al escuchar la conmoción fuera de la habitación.