Un toque de color de verano (ささやかな夏色を) es una de las ocho historias cortas de distintas franquicias posiblemente dadas a quienes compraron un libro de GA Bunko en tiendas participantes durante la Feria de Verano GA Bunko 2014.
Resumen[]
Un día a comienzos de verano, Hestia exclamó que quería ir a un país tropical. Aunque se había dado la rara ocasión que tanto Bell como ella tenían el día libre, en lugar de salir lo estaban pasando en el sótano de su iglesia abandonada. La temperatura en el sótano era más tolerable, pero en cuanto uno salía era golpeado por un sofocante calor.
Harta e incapaz de soportar el clima, la Diosa deseaba viajar para disfrutar el verano al máximo y hacer cosas típicas de la estación, como ir a un resort o a la playa. Mientras se lamentaba por no poder hacer nada de eso, Hestia veía las páginas de un libro con imágenes de distintos escenarios tropicales. Al llegar a una imagen de frutas tropicales Hestia comentó que cuando menos le gustaría comer una, y exhausta se echó por completo en el sofá.
Luego de darle un vistazo al libro y su Diosa, Bell se fue silenciosamente y regresó una hora después con una sandía justo cuando Hestia se despertó. El chico explicó que la había comprado en el Área Comercial de Orario y era una fruta de verano. Pese a que no era una fruta tropical, Bell le ofreció probarla, lo que trajo una sonrisa al rostro de Hestia, quien asintió animadamente. Hestia y Bell salieron del sótano para ir a una esquina de la iglesia y le quitaron la cáscara después de enfriarla en agua. Los dos disfrutaron comiendo la sandía bajo el atardecer mientras reían juntos.